La explotación agrícola Occhio consta de una finca en el corazón del valle del río Ticino y se extiende sobre unas setecientas hectáreas en la provincia de Pavía.
Hasta mediados de los años ‘70 la orientación productiva de la explotación consistía fundamentalmente en el servicio de la caza y, en menor medida, en la producción de cereales.
Con la institución en 1974 del Parque Natural Lombardo del Valle del Ticino (el parque fluvial más grande de Europa, con una extensión aproximada de 91.000 hectáreas), que incluyó la explotación agrícola y donde consecuentemente se prohibió la caza, la empresa centró su producción en el cultivo intensivo de arroz y maíz en los terrenos más fértiles y en la plantación de álamos en los terrenos arenosos o de escaso valor agronómico.
Solo en la segunda mitad de los años ‘90, gracias a los reglamentos comunitarios (PAC) y los programas medioambientales promovidos por el Parque, la explotación volvió a ocuparse de forma más orgánica de la gran superficie boscosa y naturalística.
De hecho, a partir de 1998 tanto las áreas ocupadas por plantaciones de álamos como otras de escaso valor agronómico fueron incorporadas en un programa de reconversión con plantación de especies leñosas denominadas “biomasa” (ciclos de quince y veinte años). La madera así obtenida se transforma en chips para el empleo en las centrales termoeléctricas destinadas a la producción de energía renovable.
En 2017 la explotación comenzó los trámites burocráticos para la conversión de todos los terrenos al sistema biológico (Reg. CE 834/07).